Antes, muchas personas dejaban sus metas personales y profesionales de lado para perseguir sus planes fértiles. Afortunadamente, hoy puedes cumplir tus sueños a tu ritmo. Congelar óvulos es una forma de detener el tiempo para que puedas decidir si quieres o no expandir tu familia y cuándo quieres hacerlo.
Congelar tus óvulos cuando son jóvenes y están en su calidad más óptima aumenta las posibilidades de conseguir un embarazo en el futuro, cuando estés lista. Estos son dos factores que tienes que tener en mente a la hora de decidirlo:
Este factor varía a lo largo de nuestra vida, pero con los años disminuye considerablemente. Los óvulos en mejores condiciones son más fértiles y, además, maximizan la posibilidad de tener bebés sanos.
Al nacer, tenemos alrededor de uno y dos millones de óvulos que vamos liberando poco a poco a lo largo de nuestra vida. A este número se le conoce como reserva ovárica. Cada año, la reserva disminuye y, con ella, nuestra fertilidad.
Cada persona es única, por lo que cada caso lo valoramos por separado. Pero si quieres hacerte una idea general de los pasos que seguirías si decides embarcarte en un congelamiento de óvulos, esto te ayudará:
El primer paso es una consulta con alguno de nuestros especialistas. Revisaremos tu historial clínico, te haremos un ultrasonido y te pediremos algunos estudios. Una vez que tengamos todo esto, evaluaremos la mejor opción para ti y diseñaremos tu plan personalizado.
El siguiente paso es estimular tus ovarios para que produzcan la mayor cantidad de óvulos posible. Tu misma te administrarás las inyecciones de hormonas para estimular la producción de óvulos (¡es muy fácil!). Durante este proceso tendrás que ser monitoreada constantemente con análisis de sangre y ultrasonidos regulares. Así podemos ver si es necesario ajustar tu dosis. Una vez que tus óvulos hayan madurado por completo, se aplicará un inyección que activará la ovulación o la liberación de óvulos.
Aproximadamente 35 horas después del disparo de ovulación, capturaremos tus óvulos por medio de un procedimiento quirúrgico mínimamente invasivo. Para esto, un especialista introducirá una pequeña aguja a través de la pared vaginal. No te preocupes: todo esto se realizará bajo anestesia local y, en la mayoría de los casos, es posible retomar actividades entre 24 y 48 horas después del procedimiento.
Una vez que recolectemos la mayor cantidad de óvulos maduros posible, estos atravesarán por un proceso en nuestro laboratorio llamado vitrificación. Inmediatamente después, los colocaremos dentro de un tanque de nitrógeno líquido para protegerlos del tiempo y el deterioro hasta que tú decidas.
Acude a una consulta con alguno de nuestros especialistas para conocer tus opciones y diseñar un plan fértil personalizado.
Importante:
No incluye medicamentos
Costo de almacenamiento a partir del segundo año
Facilidades de pago a 3 y 6 meses sin intereses
En caso de estudio genético, se requerirá una preparación endometrial y desvitrificación.
Captura de óvulos en ambulatorio y congelamiento en tanques de nitrógeno líquido para su uso futuro.
Importante:
No incluye medicamentos
Costo de almacenamiento a partir del segundo año
Facilidades de pago a 3 y 6 meses sin intereses
En caso de estudio genético, se requerirá una preparación endometrial y desvitrificación.
Si tienes dudas, échale un ojo a nuestras preguntas frecuentes o déjanos un mensaje. Nos encantará escucharte.